jueves, 14 de noviembre de 2013

Descargas de dolor recorren mi espalda, y no es una frase poética

Vuelvo a esa época en la que solo quieres hacerte una bola bajo las mantas y esperar...


Ser universitaria es genial.
                                                     Ser yo no tanto.

Sacar un 9 en tu primer examen es motivador.
                                                            Suspender en todo lo demás hunde un poco.

Levantarte cada día con una sonrisa alegra las mañanas
                                                       Que la soledad te apuñale cada noche duele.

Comprarte ropa nueva es bonito
                                                               No verte bonita con nada es una putada.

Pasear por la playa te da paz.
                                                             Andar porque no tienes rumbo desmotiva.

Enamorarte es precioso
                                                           Que salga mal es desgarrador

Estar rodeada de gente que te quiere te hace sentir bien
                                                         Sentirte sola rodeada de tanta gente es triste.



Y es que supongo que tanto cambio tiene que traer sus cosas malas, que toda felicidad tiene su efecto rebote y que hasta en los mejores momentos algo puede salir mal.



O a lo mejor es que odio los jueves.



Pero aquí estoy, ¿cómo estoy?

Supongo que mal, por eso de que lo que escribo no es precisamente algo motivador.

No sé...serán que han vuelto los dolores musculares, o que me he cansado de mirar para otro lado.

A lo mejor es que no quiero seguir más o que me apetece volver a empezar.
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O a lo mejor es que me he cansado de fracasar.

De volverlo a intentar
                                                    y que vuelva a salir mal


Que yo no quiero ver el vaso medio lleno o medio vacío, yo quiero estrellar el puto vaso contra el suelo.

Quiero que salga bien, quiero no perder el tiempo, no tener que proponerme cada día conseguir lo que no hice el día anterior porque así...

Así querida, es como se me pasa la vida.

Acéptame un consejo y deja de ponerte logros imposibles, deja de creer que puedes hacer cosas sobrehumanas, céntrate en lo que sabes hacer, estudia, haz deberes, lee, pero no intentes ser lo que no eres.


Y a ti, el que lees esto: no sé como puedes perder el tiempo aqui, como puedes leer estas chorradas, pero te voy a pedir algo, te lo pido porque tengo todo el derecho ya que a cambio te dejo sumergirte en mi, te pido que no comentes, no me mires como si me conocieras, no preguntes qué me pasa, no me digas que te identificas con lo que escribo....solo abrázame (¡joder, que hay que decirlo todo a las claras!) y luego haz como que no ha pasado nada, como que esto es solo un mal momento, en un mal día, de una mala noche de otro mal jueves.

Y mañana volveré a darle la vuelta al reloj de arena, a volverlo a intentar








Porque rendirme no es una opción y conseguirlo es dudoso


1 comentario:

  1. Creo que deberías descruzar los brazos y dar la bienvenida a los millones de personas que hacen cola para darte un abrazo. No les hagas creer que no lo necesitas. Gritalo flojito, y aquel que se dé cuenta será quién merezca la pena. Dásela toda.

    Yo estoy aquí esperando a que vengas a librarte de ella, recordándote que tú lo que odias son los martes.

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